"Somos siervos inútiles, hemos hecho lo que teníamos que hacer".

(Lc 17, 7-10)

En el evangelio de hoy Jesús nos invita a cuestionarnos sobre la manera como conducimos nuestra existencia y todo aquello que hemos recibido de Dios: “Somos siervos inútiles, hemos hecho lo que teníamos que hacer”. En muchas ocasiones buscamos la aprobación o el reconocimiento de los demás frente a nuestras acciones. Jesús nos dice que no debemos buscar reconocimientos por hacer las cosas que debemos hacer. En la vida siempre debemos ser agradecidos con lo que somos y tenemos, y al mismo tiempo, ser conscientes que es nuestro deber hacer lo que nos corresponde con responsabilidad, humildad, amor y alegría. El verdadero reconocimiento, lo recibimos del Señor que acompaña nuestra vida.

Reflexionemos: Preguntémonos: ¿Hacemos lo que nos corresponde hacer o damos mucho más? ¿Esperamos recompensa por las cosas que hacemos?

Oremos: Señor Jesús danos la gracia de hacer de la mejor manera aquello que nos corresponde.  Que nuestro corazón no ambicione reconocimiento por lo que hacemos. Que de tu mano podamos realizar nuestros deberes con amor, pasión, compromiso y responsabilidad. Amén.

Actuemos: Vivir este día la generosidad, conscientes de que nuestra mayor misión es el servicio.

Recordemos: "Somos siervos inútiles, hemos hecho lo que teníamos que hacer".

Profundicemos: "Podemos hacer milagros con la generosidad de las cosas pequeñas" (Papa Francisco)

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